martes, 3 de abril de 2012

Prográmate contra el estrés: programación neurolingüística


La realidad es del color del cristal con que se mire.


Todos saben lo que es el estrés porque lo han padecido, pero pocos conocen las formas de combatirlo. Existen herramientas muy eficaces que nos pueden ayudar a no vivir tan estresados, entre ellas la programación neurolingüística, o PNL.

Creada a principios de los años 70, la PNL trasciende los “qué” (problemas, pensamientos, conductas) y los “porqués” (razones por las que somos como somos) para centrarse en los “cómo”, es decir nuestra forma de pensar, sentir y relacionarnos con el mundo y, a partir de esto, buscar la manera de cambiar nuestros enfoques para un mayor bienestar; es decir, buscar el “cómo podemos pensar”, “cómo podemos ver las cosas”, etc.

Toda la información que recibimos del mundo exterior la captamos y procesamos a través de tres canales: auditivo, visual y kinestésico (los demás sentidos). Cada quien los utiliza en distinta medida y, según la manera como los combinemos, se pueden producir miles de millones de respuestas a una información o estímulo externo, tanto en el plano perceptivo como en el conductual.

El estrés, precisamente, es el resultado de respuestas desbalanceadas ante mensajes del entorno. Para contrarrestar este esquema, hay que concientizar la manera como pensamos. Desglosar los procesos cognitivos nos brinda la posibilidad de cambiar nuestros patrones de conducta y los resultados que obtenemos a diario con nuestra forma de pensar y actuar.

Aquello de que “la realidad es del color del cristal con que se mire” se aplica perfectamente a la PNL, la cual estimula la erradicación de creencias que tenemos muy arraigadas y que nos impiden avanzar o superar obstáculos. En general nos estresamos por creer que no poseemos los recursos para salir airosos de una situación dada, por sentirnos en minusvalía frente al mundo externo y no saber buscar en nosotros mismos las herramientas para cambiar lo que normalmente percibimos como amenazas o ataques directos estresantes.

La verdad es que todos tenemos un inmenso arsenal de recursos internos para enfrentar las situaciones que día a día nos agobian. Es cuestión de saberlos identificar, saber que los tenemos y entender que sí somos capaces de usarlos a conciencia para lograr una vida más plena. Un entrenamiento en programación neurolingüística puede ser nuestro pasaporte hacia un mayor bienestar. Si te sientes víctima del estrés y no sabes cómo combatirlo, busca una buena asesoría en PNL e inténtalo.


Fuente: http://prevencionar.com/2012/04/02/programate-contra-el-estres-programacion-neurolinguistica/

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